Archivos de Tags: Diario La Gaceta

Vino nuevo en odres nuevos

El artículo 37 de la Constitución del 78 dice que la ley garantizará el derecho a la negociación colectiva laboral entre los representantes de los trabajadores y empresarios, así como la fuerza vinculante de los convenios. Sólo año y medio después, en marzo de 1980, entró en vigor el Estatuto de los Trabajadores que dedica su Título III a la negociación de los convenios colectivos. Con algunos lavados de cara, ese texto sigue vigente a la hora de organizar las relaciones entre capital y trabajo. Y nada tiene que ver el momento actual de producción de bienes y servicios con la década de los ochenta del siglo pasado. Basta comparar cualquier ranking empresarial para comprobar cómo ha cambiado España y el mundo. Sin ir más lejos, en esas fechas todavía no se atisba la revolución tecnológica de la sociedad de la información y la comunicación ni Internet.

El espíritu del Estatuto de los Trabajadores nada tiene que ver con la productividad, la rentabilidad o la innovación. Surgió con tres premisas: devolver a los trabajadores los derechos sindicales; otorgar a los sindicatos un papel preeminente y ser dique y cauce ante la conflictividad. Cumplido este papel, y tras la crisis, las relaciones laborales van por otros derroteros.

La reforma laboral pactada por la ejecutiva de la CEOE de Díaz Ferrán ha sido un fracaso y la actual sobre negociación colectiva con Rosell ha visto en las pasadas elecciones el signo de que todo pacto firmado bajo el paraguas de Zapatero es papel mojado. De ahí su órdago a través de CEIM para cambiar una decena de artículos del Estatuto de los Trabajadores, lo que equivale a una enmienda a la totalidad. En definitiva, de nada sirve un apaño para cubrir el expediente. Se trata de echar vino nuevo en odres nuevos antes de que las condiciones de trabajo nos las impongan desde Berlín.

Artículo publicado por Jesús F. Briceño en el diario LA GACETA (Madrid), el 2 de junio de 20011

Asesores Chanel nº 5

El desapego de nuestros políticos por la economía real raya en el insulto a la sociedad. Las últimas declaraciones de Zapatero en el Congreso –afirmando “que si esto no es mejorar que venga Dios y lo vea”– serían obscenas si no nos tuviera acostumbrados a estas salidas. La macroeconomía está devorando la economía real. Acostumbrados al incremento del paro, no hay ninguna reacción en la sociedad ante este gota a gota que llena estadios todos los meses. Basta una décima de crecimiento en un trimestre para echar las campanas al vuelo y parece Jauja si se colocan Letras del Tesoro a un precio menos malo que el anterior.

Zapatero ha convocado en La Moncloa a los presidentes de las empresas del Ibex, ninguno de los cuales baja del millón de euros de retribución. Antes, se reunirá con Toxo y Méndez, dos probos funcionarios acomodados en la subvención, que sirven para aplaudir la errática política del Gobierno y para montarle una huelga general. Miles de autónomos y pymes siguen desapareciendo y la ruina de muchas familias forma parte del paisaje urbano. Pío Baroja podría completar su trilogía de “La busca”, “Mala yerba” y “Aurora roja” con las mismas escenas de miseria de principios del siglo XX en este final de etapa agónico de ZP. Roban hasta los pomos de las puertas para hacer caja, mientras los gurús de cinco tenedores venden sus recetas al mejor postor.

En un reciente artículo muy comentado el ex ministro Boyer, que ha pasado de los salones de González a los de Aznar, y ahora recala en los de Zapatero, mantiene que la solidez de la economía es mayor de lo que pretenden los analistas superficiales, los catastrofistas natos y los especuladores que apuestan al desastre. No es de extrañar que, con estos asesores que se bañan en Chanel nº 5, ZP esté convencido de que vivimos en el mejor de los mundos. Si no, que venga Dios y lo vea.

Artículo publicado por Jesús F. Briceño en el diario LA GACETA (Madrid), el día 19 de marzo de 2011

http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/opinion/asesores-chanel-n%C2%BA-5-20110318


Intereconomía TV entrega a Cáritas los 720.000 euros recaudados en el Telemaratón contra el paro

Intereconomía TV hizo ayer entrega de un cheque de 720.000 euros al presidente de Cáritas Española, Rafael del Río, con el fin de paliar los efectos del paro en tantas personas y familias, en el programa ‘El Gato al Agua’. Se trata del importe de la cantidad recaudada en el Telamaratón ‘Muévete contra el paro’, celebrado el fin de semana del 18 y 19 de diciembre de 2010 en Intereconomía TV.

Fueron veinticuatro horas de televisión en directo en solidaridad con los parados, en las que participaron numerosos invitados y profesionales de la cadena que dirige Marcial Cuquerella. La entrega de la cantidad recaudada se efectuó ayer por Xavier Horcajo, director general editorial del Grupo Intereconomía, en presencia de Antonio Jiménez, director de ‘El Gato al Agua’, líder de los programas de debate y análisis político en el prime time de la televisión en España.

Como se recordará, Intereconomía donó ya a Cáritas el beneficio de las ventas del diario LA GACETA, que dirige Carlos Dávila, del día 19 de enero del pasado año, con el fin de ayudar a los afectados por la tragedia del terremoto que ha convulsionado Haití. En esa ocasión fueron 24.446 euros. La corporación Bermont, impresora de LA GACETA, tomó la decisión también de donar a Cáritas el importe del beneficio de la impresión del diario de Intereconomía ese día. Cáritas es una institución de la Iglesia Católica dedicada a la acción social, que atiende entre otros objetivos a las familias afectadas por el drama del paro. Integrada en Cáritas Internacional, está presente en 198 países y territorios.

Entre el 18 y el 19 de diciembre, numerosos invitados, sorteos y actuaciones musicales amenizaron el Telemaratón de 24 horas, mientras rostros conocidos de Intereconomía TV animaban a los espectadores a poner su granito de arena, en tramos de dos horas. Entre los artistas participaron Pignoise, Vértice, Nati Mistral, coros como la Escolanía del Valle de los Caídos, etc. Junto a la importante aportación de empresas como Indra o la Fundación La Caixa, se produjeron no pocos ofrecimientos directos de empleo, y también ayudas en especie de diversos empresarios y entidades, como la del restaurador Pedro Larumbe.

Las anécdotas más emocionantes fueron quizá las que contaron periodistas situados en el call center de San Sebastián de los Reyes, donde se recibían las llamadas. Desde allí se pudo escuchar cómo numerosos pensionistas y gente de muy escasos recursos, con ingresos mensuales inferiores a quinientos euros, donaba generosamente cantidades hasta de 50 euros. La solidaridad llegaba hasta extremos de una señora de Ávila que ofrecía dos habitaciones de su casa para familias desahuciadas.

En las fotografías, de dcha. a izqda., Xavier Horcajo, Rafael del Río y Antonio Jiménez.
Foto: Borja Sánchez Trillo.

Pan y circo

Panem et circenses era la estrategia de los emperadores romanos para tener entretenido al pueblo. Pan de mala calidad y cristianos para los leones. Hoy el pan es poder disfrutar de unos días de asueto en Navidad y el circo lo pone el estado de alarma que prorroga la militarización de los controladores. ¿Mientras devoramos controladores alguien se pregunta por qué Moody’s está alarmado?

A pesar de los esfuerzos del Gobierno por cumplir el objetivo de déficit, el ratio deuda/PIB sigue aumentando y pasará del 62,8% en 2010 al 68,7% en 2011. Pero aún más grave es el coste de los intereses de esta deuda. En los Presupuestos Generales del Estado para 2011 se ha previsto un coste de 27.400 millones de euros en intereses, lo que equivale a ¡75 millones de euros al día! Es decir, al tiempo que se congelan las pensiones, se recortan los sueldos y se suprime la prestación a los parados de larga duración, gastamos cada día 12.000 millones de las antiguas pesetas en pagar los intereses de la deuda, aparte, naturalmente, de amortizar el principal.

Pero la situación es aún más preocupante ante el sobreprecio que nos están haciendo pagar los mercados. Hace un año, en diciembre de 2009, el diferencial de la deuda española con el bono alemán era de 58 puntos; en junio, de 224 puntos y en septiembre, mes en el que se presentaron los Presupuestos, había bajado a 173 puntos. La falta de credibilidad de la economía española y los bandazos de nuestro presidente han elevado el diferencial a 255 puntos.

La deuda que estamos colocando en los mercados es aún más cara que las previsiones del Gobierno, lo que penalizará a los más débiles en los PGE, ya que se están colocando letras pagando un 40% más de intereses que hace un mes. Todas las agencias de rating (Fitch, S&P y Moody’s), a las que desprecia Zapatero, ya nos han penalizado y aquí seguimos echando carnaza a los leones.

Artículo publicado por Jesús F. Briceño en el diario LA GACETA el 16 de diciembre de 2010

http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/opinion/estrategia-pan-y-circo

Quién cree a España

Tiene razón el Gobierno, Irlanda no es España y los mercados nos penalizan por el miedo al contagio. Pero también tiene razón la oposición cuando avisa de que la política económica necesita un cambio de timón que nos saque de este pelotón de los torpes junto con Grecia, Irlanda y Portugal. No es lo mismo el 30% de déficit de Irlanda que el 9,3% de España; ni es equiparable el PIB ni otros datos macro, pero tampoco es lo mismo el 10% de paro de estas naciones señaladas como apestadas y el 20% de nuestro país. Puede que España no corra riesgo de muerte súbita, pero está en la UVI con un encefalograma económico plano. Sin crecimiento no hay vida y sin vida no hay empleo, y el paro se lleva por delante lo mejor de nuestros recursos.

Hace una década, las economías más fuertes de Europa, especialmente el eje franco-alemán, plantearon la Europa de dos velocidades. Aznar encabezó la rebelión de los países periféricos frente a esta ley del embudo que pretendían imponer los países ricos. España hizo un esfuerzo ímprobo por cumplir los criterios de convergencia y ascender a la primera división del euro. Casi todo lo conseguido se ha tirado por la borda dando la razón a aquellos que preconizaban una división de segundo rango para españoles, portugueses y griegos.

La pelota está hoy en el tejado del Gobierno. Los mercados nos miran con lupa y quieren hechos y no palabras. Esta semana hemos tenido un ejemplo en el Encuentro Financiero organizado por Caja Madrid. El Gobernador del Banco de España presentó un análisis claro, concreto y con fecha de caducidad sobre el sector financiero. Rajoy denunció la “pasividad” y la “inacción” del Zapatero. Rato explicó que no hay confianza en la economía porque no la hay en el Gobierno. Por su parte, el ministro de Fomento, José Blanco, volvió a ofrecer un millón de puestos de trabajo verdes ante el estupor general.

Artículo publicado en el diario LA GACETA (Madrid) por Jesús F. Briceño, el 18 de noviembre de 2010

http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/opinion/quien-cree-espana

Paro y «trinque»

En un reciente foro económico una empresaria de éxito explicó que había decidido no leer periódicos durante varios meses para huir de la depresión. No sólo sobrevivió sino que su empresa es hoy más próspera. Yo no se lo recomiendo a nadie, y si algún diario deben salvar de la pira del desprecio mediático, indulten a LA GACETA. Es posible que ayer un español informado hubiera preferido nacionalizarse andorrano. O, por qué no, ciudadano del Reino Unido, que allí un socialista como Gordon Brown es capaz de convocar elecciones anticipadas, o de Alemania, donde Ángela Merkel defiende cada euro con uñas y dientes.

Cinco siglos después poco ha cambiado España de la magistral descripción de la Sevilla de finales del XVI que relata Cervantes en Rinconete y Cortadillo. Paro y trinque, lo mismo que podemos leer hoy en todos los diarios. Es posible que la trama Gürtel no sea la Filesa del PP, pero es un patio de monipodio que apesta. Si no lo hace por sus militantes, los 4.166.618 parados, muchos de los cuales ven en el PP una alternativa para encontrar un puesto de trabajo, exigen de Rajoy que expulse del partido a los corruptos. Los mismos que tienen derecho a que José Bono explique la elasticidad del dinero público para fines privados. Quizá sea una inestimable contribución a la teoría económica, más encomiable aún que los beneficios del coche eléctrico o las energías renovables.

Precisamente esta semana asistimos a la puesta de largo de los planes para la implantación de la economía sostenible con un denominador común: la subvención. Las ocurrencias de Zapatero contra la crisis se basan en que cada puesto de trabajo que se crea cuesta dinero, sin contar el despilfarro generalizado a través de los ministerios superfluos. Si el ampurdanés Josep Pla viviera volvería a pronunciar su famosa frase al descubrir Nueva York convertida en un ascua de luz: “¿Quién paga todo esto?”

Artículo publicado por Jesús F. Briceño en el diario La Gaceta (Madrid) el 8 de abril de 2010